No es la primera vez que
escuchando los ecos de las canciones de estos muchachos provocan en mi una
reacción automática que me surge, como si de un ¡¡¡¡Ole!!!! se tratase. Digo
que no es la primera vez, pero si es cierto que escuchando sus letras en el silencio
de mi casa, me doy cuenta de que todo lo que estos chavales mamaron de pequeños
se fue acumulando en sus corazones, lo cual unido a que en su genética siempre
han llevado la materia prima, como son unas voces que seguramente han cuidado y
trabajado, pero que una larga herencia del gusto espontáneo por la canción que
todos recordamos en sus familias, no le son extrañas a las cuerdas de sus
gargantas.
Los hermanos Cosio han paseado
sus canciones por toda Cantabria, por muchas partes de España, y seguramente
por algunas de fuera de ella, lo que si estoy bien segura es que en ningún
lugar de los muchos que tienen en sus largos recorridos, sus sentimientos son
tan fuertes como cuando las cantan en los lugares que los vieron nacer y
crecer.
Vivo en un pueblo pequeño
donde viviré el
placer
los gallos en
el corral
cantan al
amanecer
Tengo vacas tengo yeguas
cabras y
ovejas también
tengo una
perra pastora
la compañera
mas fiel
Y ando buscando una moza
que se
quisiera casar
que sepa segar
la hierba
y también sepa
ordeñar
y si acaso no la encuentro
que todo
pudiera ser
también me
conformaría
si me supiera
querer
pues algo tengo
bien claro
lo he tenido y
lo tendré
tan recia como
mi madre
yo nunca la
encontraré
Y es que mi
madre señores
no es por que
lo diga yo
primero ordeñó
las vacas
y mas tarde me
parió
Cuando en el último concierto que
cantaron en Celis por la fiesta de San Pedro les escuchaba, su repertorio se
componía de las últimas canciones a las que Rafi como compositor del grupo había
puesto sus preciosas letras, y ese día no dejé de recordar, cuando por primera
vez,- hace ya tiempo les escuché una dedicada a su madre,- lo deprisa que había
pasado el tiempo, y recordaba aquellos años en que todas las que éramos unas
jovencísimas madres en aquellos años, salíamos con nuestros hijos pequeños,
aquellos domingos, en que en nuestras casas yo creo que no teníamos ni siquiera
aquellas primeras televisiones en blanco y negro, que tal vez nos haría
quedarnos en nuestras casas, por que lo cierto era que la mejor distracción que
entonces teníamos al alcance de la mano eran aquellas tardes de los domingos,
en que formando grupos alrededor de unas mesas, en el bar de Memes, pasábamos
las tardes del otoño y del invierno junto a los cochecitos y las sillucas de
nuestros hijos.
No era una mala forma de pasar
las tardes, en aquel tiempo el pueblo de Celis tenía mucha vida social, mucha
distracción, el baile en el moderno salón que hacia poco tiempo, vino a
reemplazar el antiguo y entrañable Portalón, en el que tantas tardes de
domingos, las diferentes "tandas" de chavaleria encontramos nuestra
mejor forma de divertirnos, y allí, en el gran bar de Memes, contemplábamos, a
través de sus ventanales como la actual juventud que nos estaba tomando el
relevo, acudía a aquel salón ( por que era un gran salón,) que después de la
importante obra que en el se realizó, en nada envidiaba a cualquier sala de
fiestas de lugares mucho mas importantes que nuestro pequeño pueblo.
Allí en el bar de Memes recordando nuestra aún reciente juventud, sintiéndonos al mismo tiempo orgullosas de haber superado una etapa de nuestras vidas, y tener ahora otras responsabilidades en las que estábamos ocupadas. Éramos unas cuantas parejas de matrimonios muy jóvenes, y entre estas madres, Milia la madre de los Cosio, también era una mas de aquellas tertulianas.
Pasados unos años, y debido al
cambio que nuestra zona experimentó, con el traslado de los mineros de la
Florida a las de Reocín en Torrelavega, algunas familias obtaron por empezar
una nueva vida en aquella ciudad, todos eran trabajadores muy jóvenes, y
comprendieron que para evitar los constantes viajes de ida y vuelta del pueblo
al trabajo, y del trabajo a casa, lo mejor era establecerse en aquella ciudad,
pensando también que sus hijos podrían tener con el tiempo mejores
oportunidades. Y así de esta forma algunos vecinos como la familia de los Cosío,
marcharon de su pueblo buscando otras oportunidades, pero como siempre han
demostrado en sus canciones, las raíces de estos pueblos, nunca las han
olvidado.
Todo esto me pasaba por la
cabeza, escuchando las canciones de estos muchachos, que vimos crecer entre,
los demás niños del pueblo.
Pero como todo evoluciona, las
canciones también van sonando con otras letras, lo que no quiere decir que las
ya muy escuchadas no nos llenen de nostalgia, y si no ahí esta la canción que
mejor ha definido siempre el caminar de esta familia. La Caza, así con
mayúsculas.
Un deporte que ha sido siempre su
mejor seña de identidad, bueno digamos que una de ellas, pues en esta familia ha
habido buenos herreros, buenos albarqueros, buenos cantantes, pero sobre todo
muy buenos cazadores.
Las cinco de la
mañana
la escopeta en
el rincón
el perro en la
calle inquieto
barruntando la
función,
envuelto en
la servilleta
y posada en el
fogón,
el almuerzo
que llevara,
a cazar con ilusión
Mi abuelo me lo
contaba
aquello si era
afición.
Cazadores los
de antes,
aquello si era
cazar,
era esfuerzo y
sacrificio,
todo a base de
bregar.
Todas estas letras sonaron hace
unos años en sus conciertos, pero tienen tal verdad, que no está de mas darles
un repaso. Hoy un cuaderno de vivencias va anotando otras letras. También
aquellas chavalucas, que vimos dando sus primeros pasos, en todos los
escenarios, acompañando con sus magnificas voces a la de su padre y sus tíos,
se nos han hecho mayores, sus "sayas" de montañesucas, han quedado
atrás, y ahora mueven por el escenario una modernidad mucho mas acorde con el
cambio de los tiempos.
Con esto no esta de mas decir que con aquellos
trajes, trasmitieron toda la inocencia y toda la humildad de unos principios,
con los que conquistaron y arrastraron miles de seguidores. Pero todo
evoluciona, y ahora aquellas dos niñas, muy pequeñas, que empezaron a darse a
conocer al lado de su padre y sus tíos, son hoy unas modernas y guapas
jovencitas, que han sabido madurar sus voces al tiempo que su imagen. ¡¡¡Ole
por ellas !!!
Pero los conciertos siguen, los
seguidores son cientos en cada romería, y las letras siguen evocando lo mejor
de nuestra tierra, son vivencias que todos llevamos en el corazón, cada una es
un trozo de vida, de la vida pasada y del presente, del recuerdo de la orfandad
de un caballo, o de lo vivido en la licencia de la mili pasada en tierras
riojanas. Sin embargo nada en este trabajo me ha llegado a emocionar tanto como
la dedicada a la perruca malograda en una montaña.
hija de aquel patas largas,
famoso de la canción
era mi perruca Sagra
con tres hermanos
llegó
era la herencia y la
sangre
era una nueva ilusión
Su negro pelo brillaba
,
igual que el buen mineral
era mascota en la casa
avisadora y leal
ladraba ante las
sospechas
como feroz animal,
En muchas pruebas de
rastro
la vieron participar
y la suerte de su lado
quiso un día sentenciar,
de España la campeona
se consiguió proclamar,
Con cuatro años sufría
una maldita lesión
para curar aquel daño
a Madrid fuimos los
dos,
el regresarla con vida
era una interrogación.
De vuelta para mi
tierra
pensé en poderla perder,
y en los montes de
Urbaneja
ya se quería mover,
yo emocionado la dije
tu volverás a correr
Cuatro lindos años mas,
la vida la concedió
hasta que un día entre
riscos
sin darse cuenta
cayó
no daba el brazo a
torcer
la suerte en esta ocasión
llevaba nombre de
peña
y en una peña
murió
para mi aún sigue
viva
aunque nadie mas la vio,
a
veces allá en lo lejos - oigo en el monte su voz.
Solo nos queda esperar que ese
cuaderno, donde Rafi seguirá apuntando
sus recuerdos y sus vivencias, nos vuelva a emocionar con otras historias. La
vida da para mucho, pues a medida que va girando, nos va enseñando nuevas
experiencias, y a estas solo les faltaran los sonidos y las voces, y eso ellos,
los Hermanos Cosío, lo saben hacer muy bien, después el reconocimiento y los
aplausos los pondrá su público.
MARY PÉREZ. DE CELIS,
Pero cuanto escribes Mary
ResponderEliminarPero que artículo mas bonito y real as. escrito Mary. !!!
ResponderEliminarQue artículo mas real y bonito as escrito Mary !!
ResponderEliminarMuchas gracias, me alegro de que lo hayas disfrutado
EliminarLa canción que empieza "Vivo en un pueblo pequeño" y termina "y más tarde me parió" la oí en un video de la Fiesta de Movejo en la que cantan unos cuantos, el principal Nando el de Aradillos. Pero esa canción la canta al final un chaval que me pareció oir que se llama Alberto el de Cieza. Y mi pregunta: ese chaval siguió cantando o era un actuante esporádico. Soy casi cántabro, orgenomesco de Asturias y me encantan las tonadas cántabras.
ResponderEliminarMe respondo a mi mismo para aclarar que no he sido muy correcto al poner "tonadas cántabras" pues toda la vida se han llamado tonadas montañesas.
EliminarNo conozco a dicho chaval, pero seguramente seria alguno invitado por el grupo " hermanos Cosió "
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