domingo, 5 de julio de 2015

HISTORIA DEL VALLE DE LA MARQUESA









Estas historias y recuerdos, aunque los llame así en el titulo de mis crónicas, no son solo eso, son historias, anécdotas, leyendas…cosas que, unas sucedieron otras solo sabemos de ellas por lo que nos han contado, y  que, al pasar de los años, se nos quedaron en la memoria. Cierto es que a la gran mayoría de nosotros, cuando se nos pregunta por las cosas de hace muchos años, las tenemos bastante vivas en el recuerdo, son aquellas historias (verdaderas o no) que escuchábamos a las gentes de nuestros pueblos, otras son las vividas por nosotros mismos, y muchas veces pienso lo rápido que pasa el tiempo, al darme cuenta de que muchos de los recuerdos son de cuando éramos niños, por ejemplo cosas de cuando íbamos a la escuela, de los compañeros con quienes compartíamos pupitre, de las lecciones de nuestras maestras, por eso quiero extenderme un poco en unos recuerdos con los que estoy segura, muchos amigos lectores se sentirán muy identificados, aunque esto sea como un preámbulo al relato que quiero contar, y cada día me doy mas cuenta de lo mucho que nos enseñaban, con los pocos medios de los que disponían nuestros maestros, pues de esta historia, por ejemplo, ya sabíamos de sus orígenes desde que éramos pequeños, lo que pasa es que los años van difuminando los recuerdos, pero nunca se borran del todo, solo hace falta poner esos recuerdos en marcha cuando nos vienen a la mente, y ahí están. En mi pueblo, la escuela estaba separada de la de los niños, siempre hubo maestras y maestros).
Eran años en los que la severidad de nuestros maestros hacían que las lecciones se aprendiesen a conciencia, yo particularmente, no alabaré, pero tampoco   renegaré nunca, de la forma en que mis maestras me enseñaron, cierto es que los métodos no serian hoy aceptados pedagógicamente, pues quizá sobraría algo de brutalidad, y lo digo por propia experiencia, y por lo vivido por muchas de mis condiscípulas, pero contemplando los tremendos problemas que ahora tienen los enseñantes con estas actuales generaciones, la enorme relajación en la educación, lo poco preparados que están unos alumnos, que por otra parte, tienen todas las comodidades en unos colegios, en los que en unas aulas separadas por cursos, pueden estudiar solo los temas que la edad de ese curso precisa,  pienso que los estudiantes a los que ahora se le imparte enseñanza, están a años luz de la forma en que a los críos de mi generación, de generaciones anteriores, y también bastante posteriores nos tocó vivir. Pero como digo, nunca podré renegar de aquella enseñanza, son muchas las veces que me quedo pasmada, al ver y escuchar a chavales que ya están  a punto de empezar estudios superiores, que no conocen nada de la historia de su país, de nuestra historia, pero es que poco o nada conocen de nuestra geografía, la gran mayoría no saben como se llaman nuestros ríos, y claro ni mucho menos donde nacen, y por que territorio discurren, la geometría mas básica les suena a chino, y así suma y sigue. Eso si, tengo que reconocer que nos dan treinta vueltas en las últimas tecnologías, la informática, desde que son unos renacuajos no tiene ningún secreto para ellos, y se ponen al frente de un ordenador, o manejan esos modernos artilugios desde los que son capaces de realizar las mas increíbles combinaciones, y ríete tu cuando de montar cualquier película o videos caseros se trata, ¡son unos genios!
Sin embargo si como digo es de lo que normalmente se conoce como conocimientos, lo que se estudió toda la vida, ahí fallan de largo, y es donde a mí me cuesta entender por que a unos chavales que tienen tantas facilidades, no son capaces de saber por ejemplo donde nace el río Ebro.
Las incompatibilidades en estas edades entre estas materias, y los estudios tecnológicos   no deberían estar reñidas, esto lo sabemos muy bien los muchos niños que fuimos educados en unas escuelas rurales enormemente masificadas, en las que unos maestros y maestras se las tenían que ver con todos los niños de unos pueblos en los que, desde la edad de seis años, hasta los catorce, en que acababa la llamada educación primaria, nos enseñaban, en una sola aula, desde las diez de la mañana, hasta las cinco de la tarde, (con el receso desde la una hasta las tres, horario de comida y un recreo de apenas media hora por la mañana,) todas las asignaturas que unas maravillosas enciclopedias “Álvarez,” que variaban en función de nuestras edades y cursos, nos ofrecían. Pero digo lo de las incompatibilidades, por que  después de esto, cuando llegábamos a nuestras casas, el que mas y el que menos, teníamos una serie de obligaciones que había que cumplir, y no quiero cansar a nadie enumerándolas, pues seguro que en la mente y el recuerdo de todos están estas obligaciones de que hablo.   
Por todo esto, y por que todos tengamos un mejor conocimiento de la historia que tenemos mas cercana a nosotros, quiero dar  a conocer, para aquellos que de una forma u otra les pueda interesar, lo escrito por personas que mucho antes que yo quisieron dejar constancia de estos hechos.  Y es que, ¡cuantas veces repasando libros, me he encontrado en su lectura con muchas situaciones en las que me viene a la memoria que eso que estaba leyendo, yo lo había estudiado ya!, y es en ese momento de la lectura cuando pienso en la gran importancia de todo lo que aprendimos cuando éramos pequeños.
Por todo ello, y a través de estas tecnologías, que como digo nunca pueden ser de incompatibilidad con los demás conocimientos, les quiero ofrecer hoy  otro de los reportajes que ya hace tiempo quería dar a conocer, pues aunque resulte algo denso en su historiografía, no por ello le resta interés a unos hechos que nos darán un mejor conocimiento de la historia de nuestra comarca.
Hace un tiempo en la publicación en la que colaboré durante unos años, concretamente en el artículo que llevaba por título, “Puentenansa  cruce de caminos” hacia referencia a  por qué a este pueblo siempre se le asociaba con el llamado “Valle de la Marquesa”. En dicho artículo, hacia mención a mi desconocimiento de donde venia dicho nombre y prometiendo que haría todo lo posible por enterarme de dicha historia.  Pues bien en este reportaje sacaré de dudas a aquellos que, -como yo en su día- no tengan conocimiento de ello
 Empezaré por decir que el nombre de “Valle de la Marquesa,”no es patrimonio de la zona de Puentenansa,- por lo menos no en su totalidad,- lo que ha debido de ocurrir es que tal vez sea el lugar en el que mas se ha reivindicado su nombre, pues desde muy antiguo a las gentes de éste lugar les ha gustado definirse así.
La historia según, los libros en los que he buscado referencias, empieza hace muchos años, concretamente en el 1371. En esta fecha, Enrique II de Trastámara, Rey de Castilla, cede a su hermano Don Tello, el Señorío de Castañeda y Aguilar de Campoo, además de muchas otras de las que era propietario el Rey, en las Asturias de Santillana, ordenándole que en adelante se hará llamar, Señor de Lara y Aguilar de Campoo. Para todo esto me han servido de gran ayuda, los datos recopilados en un libro, por Don Dionisio Fernández, quien fuera durante muchos años médico titular de Rionansa, y gran investigador de todo lo relacionado con la historia de la zona del Nansa, y del que yo he recabado la mayor información.
Posiblemente relacionado, o emparentados con éste Señor, contraen matrimonio Doña Leonor de la Vega y Don Juan Téllez, tal vez aconsejados por el Infante Don Tello, y así poder controlar mejor la zona norte de Castilla la Vieja.
En 1385 fallece, Don Juan Téllez,  y en 1392 lo hace su hijo primogénito, y único varón, llamado Juan el “Mozo”, quedando como única heredera su hija, Doña Aldonza, Téllez de Castilla, y así se hace ésta señora con la herencia por vía paterna de la Casa de los Vega, del Señorío- Condado de Castañeda,- además del vasallaje de Rionansa entre otras muchas propiedades, como el del Valle de Iguña y el Val de San Vicente, con lo que se hace dueña del primer titulo nobiliario de Condesa de Casteñeda.
Casa dicha Señora con un poderoso y rico infante, y muy hábil político, Don Garci Fernández Manrique, consolidándose de este modo un gran poderío señorial.
En 1421, Doña Aldonza Tellez, en el entonces Santuario de Castañeda,(hoy Colegiata de Castañeda, del siglo XII ) toma posesión en un acto de gran solemnidad, en el que estaban presentes todas las máximas autoridades de la comarca, de el rico legado, que como única heredera le corresponde. En dicho acto se leyó una carta de su señor y rey, que confirma que,”mujer de dicho Señor Conde por Señora e por Condesa de dicho condado en nombre de dicho Señor Conde”
El Rey de Castilla Juan II confirma también a Garci Fernández  Manrique, el Condado de Castañeda con el título de Conde, por pertenecer dicho condado a su esposa Doña Aldonza, como legítima heredera de su padre Don Juan Téllez, así el Señor Conde deja bien atado que en caso de morir sin descendencia su esposa Doña Aldonza no fuese desposeída de su patrimonio.
El Señor Conde emprende entonces un recorrido por todas sus posesiones que durará mas de un mes, concretamente desde el 2 de noviembre y terminando el 13 de diciembre comenzando por el Valle de Toranzo y terminando en Luey, por ser ésta principal aldea y capital en aquel tiempo del Valle del Nansa. Actualmente se conserva en dicho pueblo, y muy restaurada, la Casa Mayor que albergó dicha capitalidad. Esta aldea era la mas poblada y la mas importante en aquella época, por que aquí se ubicaba el mas prestigioso monasterio de toda la zona, dotado de grandes privilegios, como era el Monasterio de San Salvador de Luey.  Este monasterio era en parte dependiente de la Colegiata de Castañeda a la que pagaba” e rentas e pechos e otros derechos.”
En la segunda mitad del siglo XVIII sucede un hecho bastante insólito que no había ocurrido durante todo el mandato del Condado de Castañeda y Aguilar, queda sin continuidad la varonía directa de la sucesión, y es entonces cuando toma posesión la heredera mas directa, cumpliéndose así las voluntades dadas por el Rey Don Juan II a Doña Aldonza, en carta leída el día de la toma de posesión en 1421 y que decía así,” e si acaeciese que en vuestro linaje non aya ni quede ningún fijo varón legítimo que lo herede con dicho título, la fija mayor que ende fuere e los que con ella vinieren para siempre jamás”.  Y así es como, pasados los años, se cumple el nombramiento con mando y gobierno de la Excelentísima  Señora Marquesa de Villena y Aguilar, Condesa de Oropesa, Señora de este Val de San Vicente, Rionansa, y Tudanca. En el auto del Buen Gobierno del Valle del Nansa en el lugar de Luey a 16 días del mes de febrero de 1752, y así lo hace saber Don Félix Antonio de Aro y Mingote, Abogado de los Reales Consejos, Corregidor y Juez, con residencia en dicho valle.
 Como final de este relato se sabe que ninguna mujer tuvo autoridad ni mando de gobierno (por muchos títulos que tuviese) en el periodo de cuatro siglos desde 1421 hasta 1752 a excepción de la Exma. Marquesa de Aguilar y Villena, Oropesa, y Señora de este nuestro Valle del Nansa, y que hallan podido llegar por tradición oral hasta nuestros días expresiones tales como, !!somos del Valle de la Marquesa¡¡ pero no solo los habitantes de Puentenansa, sino todos los  de la comarca del Nansa ¡¡somos del  Valle de la Marquesa!!                  
                                NOTA . Muchos de los datos históricos que he podido recopilar se encuentran en un interesante libro escrito por Don Dionisio Fernández , médico titular durante muchos años en el Ayuntamiento de Rionansa, por lo que recomiendo su lectura, en el se pueden encontrar muchos mas datos que no solo hacen referencia al Marquesado, sino a toda la zona del Nansa.
                               Espero les guste este relato histórico, se trata de tener un mejor conocimiento de nuestra comarca, y como no,  también de los orígenes de nuestra zona.
                                            MARI  PEREZ.  DE  CELIS.                                        
                               
                           
                                                                                 

7 comentarios:

  1. Hola. Me interesa mucho tu historia. Mi familia es de Celis y me gustaria conseguir el libro de Dionisio. Sabes cómo puedo tenerlo? Gracias. ¿Me escribes a cristinavelezrubin@gmail.com?

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  2. Mari ,que bién te explicas y que razòn tienes los niños de hoy manejan muy bién el ordenador pero culturalmente dejan mucho que desear ,si preguntas a cualquier chico quién és Ronaldo o Me si,,todos lo saben,pero ninguno sabe quién es Severo Ochoa y no tienen ni idea quue esistiò Cervantes,y no quiero seguir ,por que hoy no es "mi día",pero tienes toda la razòn

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  3. Mary, escribes unas historias preciosas y en algunas reconocemos lugares, personajes, situaciones.... etc. yo disfruto mucho leyéndolas.

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  4. Cristina Velez, perdona que halla retrasado tanto mi contestación. pero es que no suelo mirar muy a menudo mis escritos, y se me habia pasado, en el caso de que no te hallas podido hacer al libro de D. Dionisio, solo te puedoaconsejar que te pongas en contacto con su familia para ver si te lo pueden proporcionar. El mio fue un regalo de una persona amiga, solo se que es dificil de encontrar en las librerias de Cantabria, pues mas personas que lelleron la historia me han preguntado por el.

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  5. Muchas gracias Conchi, me alegro que te guste, y gracias tambien a Amparito

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  6. Quisiera hacerme del libro ,iré al biblioteca de unquera ,y si no le tienen intentaré encontrarle pues me interesa la historia de Luey pues aunque soy de luey no estoy enterado de todo

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    1. Buenas, tal vez ya no le haya pero yo le compré hace años en la gasolinera de Puentenansa

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