Hola amigos, desde hace ya unos cuantos años, vengo
asistiendo como invitada a la gran barbacoa que se organiza en Celucos por la
fiesta de su Santo Patrón San Juan.
Puedo decir como nota aparte, que sin embargo en la fiesta
de San Juan no hacen falta invitaciones, todo el mundo siempre será bienvenido,
pues si algo han tenido siempre los celucorios, es lo acogedores que ya desde
que yo tenga memoria han sido recibiendo a cuantos nos hemos acercado a este
pueblo, y desde luego en la fiesta de su Patrón, el ser bien acogidos se da ya
por descontado.
Pero si hacemos un poco de memoria del recuerdo, en ella
encontraremos personas que a pesar de los años que faltan en Celucos, pareciese
que cada vez que paso un rato por el pueblo, los voy a ver asomarse por
cualquiera de sus caminos.
Personas muy queridas por todos, y que dejaron tantos recuerdos entre los cruces de esos caminos… entre las paredes de esas casas… en sus portales, donde nunca faltaban las largas tertulias, los encuentros entre amigos, las confidencias entre vecinos.
Personas muy queridas por todos, y que dejaron tantos recuerdos entre los cruces de esos caminos… entre las paredes de esas casas… en sus portales, donde nunca faltaban las largas tertulias, los encuentros entre amigos, las confidencias entre vecinos.
Entre esos recuerdos, siempre tengo el de Poldo, conocido como Poldo el del Condal, creo que
este nombre le venía dado de su descendencia del pueblo de Obeso. También a Lea su mujer, así como a sus hijos, sobre todo Vitorín, que murió
siendo muy joven. A su otro hijo, Poldín, lo conocí en Rota, donde marchó
siendo un niño, y donde ha vivido desde entonces.
Otro de los buenos recuerdos es el que tengo de Pepe Rubín.
Esta familia se trató mucho siempre con
la mía. Por lo visto mi madre y mis tías subían diariamente a la panadería de
Puentenansa, y también lo hacía Pepe Rubín, pues era el encargado de la
repartición del pan en el pueblo de Celucos.
De ahí que por el mucho trato diario que había entre las dos familias, no era raro que algunos de nosotros fuésemos también convidados a comer en su casa en la fiesta de San Juan. Su mujer Pura, y también sus hijos Nino, Servando, Min, y Andrés, así como Nen, el único que queda con vida, son buenos referentes de esta excelente familia.
De ahí que por el mucho trato diario que había entre las dos familias, no era raro que algunos de nosotros fuésemos también convidados a comer en su casa en la fiesta de San Juan. Su mujer Pura, y también sus hijos Nino, Servando, Min, y Andrés, así como Nen, el único que queda con vida, son buenos referentes de esta excelente familia.
Mención aparte de estos hermanos, por muchas razones, es
Andres. Andres la persona que ha dado a conocer el nombre de Celucos, por
cualquier parte de nuestro territorio.
Él, junto a Ina, su mujer, así como sus hijos, Andresín y Eduardo QEPD, fueron los mejores embajadores del nombre de Celucos, por cualquier lugar de los muchos que, personajes de mayor o menor relieve, visitaron su Restaurante atraídos por su buenísima y abundantísima cocina, así como por su excelente y familiar trato. Algo que estoy segura, no se olvidará aunque pasen muchas generaciones.
Él, junto a Ina, su mujer, así como sus hijos, Andresín y Eduardo QEPD, fueron los mejores embajadores del nombre de Celucos, por cualquier lugar de los muchos que, personajes de mayor o menor relieve, visitaron su Restaurante atraídos por su buenísima y abundantísima cocina, así como por su excelente y familiar trato. Algo que estoy segura, no se olvidará aunque pasen muchas generaciones.
¡Y quién no recuerda a Manuel y Rumaldo Sanchez,! “Sanchi” para s us vecinos y amigos, así como a
sus mujeres, Lucia y Nemesia. También a sus hijos, Manolito por parte de
“Sanchi” y Aurelia, Lines, Marrosa, y
Paco por parte de Rumaldo y Lucia. Las nietas de estos dos hermanos, son por la parte de Rumaldo, y Lucia, Rosi y Loli, y por la parte de Manuel y Nemesia, Javier y Fátima, Todos ellos gente noble y muy familiares. Sin hacer apartes con los demás, con Rosi y Fátima me une mucho cariño, a Fátima le mando además toda la fuerza de ese cariño.
Tambien se recuerda mucho a Manuela una mujer muy ocurrente,
o a su hermana Cion. A Milia la renovera
a el “Cojo” así como a sus hijos, sobre todo a Lin que nos dejo en fecha muy
reciente. A Vidal y su grito de grerra “ Pumba Matilde” A
Lauriano Barón, el de la Cuesta y su mujer Angela, bellísimas personas, lo
mismo que sus hijos y nietos, A Vicente Yera, Herminia, su madre, y Julia su
mujer A Maria Torre y sus hijos.
A Delfin e Higinia su mujer, sus hijos, Jose Maria, Ito, Nelete, y Miliuca, y su viuda Sagrario y yerno Segundo, marido de Miliuca. A Benjamín y Maria Teresa, así como a su hija y nietos, tantos y tantos vecinos que caminaron y caminan por esos “callejos” de Celucos. Hilaria y sus hijos, Paco, Cuca, Arsenio, Cayo, y Pepita. Así como su hermana Maria y Antonio, y sus hijos. Nino, Carlos, Tere, Pilar, y Finita, tristemente fallecida muy joven.
A Delfin e Higinia su mujer, sus hijos, Jose Maria, Ito, Nelete, y Miliuca, y su viuda Sagrario y yerno Segundo, marido de Miliuca. A Benjamín y Maria Teresa, así como a su hija y nietos, tantos y tantos vecinos que caminaron y caminan por esos “callejos” de Celucos. Hilaria y sus hijos, Paco, Cuca, Arsenio, Cayo, y Pepita. Así como su hermana Maria y Antonio, y sus hijos. Nino, Carlos, Tere, Pilar, y Finita, tristemente fallecida muy joven.
Y entre todos ellos, y aunque estén, un poco al final, Manuel y Cunda. Y no será porque no tuviesen
méritos para ser de primerísima fila, pues el portal de la casa de Manuel y
Cunda, fue durante muchas generaciones el mejor lugar de encuentro de
cualquiera de los vecinos de Celucos. Manuel un hombre cordial y muy habilidoso
para cualquier menester que se precisase.
Toda su vida vivió del campo, lo que no le impidió desarrollar múltiples actividades, lo mismo trajinaba la carpintería, que armaba los muros de una casa o cuadra, que realizaba trabajos de cestería que ensamblaba cordeles con las crines de los caballos…
Un caso parecido al de las habilidades que Manuel supo desarrollar a lo largo de su vida, lo encontraríamos en su primo Nano “el de las Conchas,” vecino de Celis, los dos dejaron innumerables muestras de cómo con trabajo, inteligencia e idea se podía sacar adelante cualquier menester que se le presentase.
Y no seria por que sus estudios no fuesen mucho mas allá de unos pocos años de escuela en sus pueblos.
Cunda la mujer de Manuel, además de ser también, al igual que su marido, una mujer de carácter simpático y alegre, era una excelente cocinera, muy solicitada en todos los eventos que se precisase una cocina con todas las garantías para quedar bien.
Sobre todo en las bodas que se celebraban en los pueblos hace años, el tener a Cunda como cocinera, era seguridad de que la cocinera reunía todas las garantías de buena comida. Cunda y Manuel fueron también padres prolíficos, sus nueve hijos.
Solina, Lupe, Manolo, Juan, Santiago, Covadonga, -a la que hace muchos años que no veo, pero que recuerdo también con mucho cariño,- Aurora, (Guina a la que mando un gran abrazo, pues se por los duros momentos que está pasando, un abrazo, también para toda su familia.) Ricardo, y Lolita. son la prueba de ello, unos hijos y unos nietos que siempre han demostrado mucho cariño por sus padres y por sus raíces. En resumen por su pueblo de Celucos.
Toda su vida vivió del campo, lo que no le impidió desarrollar múltiples actividades, lo mismo trajinaba la carpintería, que armaba los muros de una casa o cuadra, que realizaba trabajos de cestería que ensamblaba cordeles con las crines de los caballos…
Un caso parecido al de las habilidades que Manuel supo desarrollar a lo largo de su vida, lo encontraríamos en su primo Nano “el de las Conchas,” vecino de Celis, los dos dejaron innumerables muestras de cómo con trabajo, inteligencia e idea se podía sacar adelante cualquier menester que se le presentase.
Y no seria por que sus estudios no fuesen mucho mas allá de unos pocos años de escuela en sus pueblos.
Cunda la mujer de Manuel, además de ser también, al igual que su marido, una mujer de carácter simpático y alegre, era una excelente cocinera, muy solicitada en todos los eventos que se precisase una cocina con todas las garantías para quedar bien.
Sobre todo en las bodas que se celebraban en los pueblos hace años, el tener a Cunda como cocinera, era seguridad de que la cocinera reunía todas las garantías de buena comida. Cunda y Manuel fueron también padres prolíficos, sus nueve hijos.
Solina, Lupe, Manolo, Juan, Santiago, Covadonga, -a la que hace muchos años que no veo, pero que recuerdo también con mucho cariño,- Aurora, (Guina a la que mando un gran abrazo, pues se por los duros momentos que está pasando, un abrazo, también para toda su familia.) Ricardo, y Lolita. son la prueba de ello, unos hijos y unos nietos que siempre han demostrado mucho cariño por sus padres y por sus raíces. En resumen por su pueblo de Celucos.
Otras de las buenas gentes de Celucos, son la familia
Fraile, y muy especialmente mando un abrazo a Ceferino, una de las mejores
personas que yo halla conocido en toda mi vida, y también un recuerdo
inolvidable para Jose Luis, así como a Parines su mujer. Toda la familia es
digna de recuerdo, pero a estas personas en particular, les he tenido – y les
tengo – un cariño especial.
Y como no, un recuerdo también, para la familia Lamadrid,
Ángela y su marido Rumaldo,( creo que se llamaba así), cuyo recuerdo se pierde un poco, por los
muchos años de su fallecimiento.
Pero queda el recuerdo de sus hijos, Francisco, ( Quico el de la Portilla) Manolín, Rumaldo, Maria,y Ángeles. Ninguno vive en la actualidad, pero todos, excepto Ángeles, y Manolin, solteros los dos, han dejado herederos de la saga. Que sea por muchos años.Seguramente se me quedan muchas personas por nombrar. aunque estoy incluyendo algunas fotos y recuerdos que me van llegando. esta foto, por ejemplo, ha llegado a mi de manos de Nano, el hijo de Juan y María Barón. Su recorrido también es muy interesante. Un día se enteró de que esta foto la tenía Gabriela Rubín, nieta del tío Valentin de la Coterona.
El interés de Nano por esa foto, era debido a que en ella estaba un tío suyo, hermano de su padre, y el motivo de que estuviese en poder de Gabriela era que este había sido contratado como carretero por su abuelo, el tío Valenin. Incluyo la foto en este relato, y también los nombres de dos personas que Nano me comentó, que eran hermanas y que también fueron importantes en Celucos por buenas razones, son estos nombres los de Teresa la "portilla" y su hermana Milagros. Yo como comprenderéis no tuve el gusto de llegar a conocerlas, seguramente sería muy pequeña cuando murieron, pero me parece puesto en razón que se incluyan aquí sus nombres, seguramente las gentes de Celucos tendrán buenos recuerdos de ellas.
Pero queda el recuerdo de sus hijos, Francisco, ( Quico el de la Portilla) Manolín, Rumaldo, Maria,y Ángeles. Ninguno vive en la actualidad, pero todos, excepto Ángeles, y Manolin, solteros los dos, han dejado herederos de la saga. Que sea por muchos años.Seguramente se me quedan muchas personas por nombrar. aunque estoy incluyendo algunas fotos y recuerdos que me van llegando. esta foto, por ejemplo, ha llegado a mi de manos de Nano, el hijo de Juan y María Barón. Su recorrido también es muy interesante. Un día se enteró de que esta foto la tenía Gabriela Rubín, nieta del tío Valentin de la Coterona.
El interés de Nano por esa foto, era debido a que en ella estaba un tío suyo, hermano de su padre, y el motivo de que estuviese en poder de Gabriela era que este había sido contratado como carretero por su abuelo, el tío Valenin. Incluyo la foto en este relato, y también los nombres de dos personas que Nano me comentó, que eran hermanas y que también fueron importantes en Celucos por buenas razones, son estos nombres los de Teresa la "portilla" y su hermana Milagros. Yo como comprenderéis no tuve el gusto de llegar a conocerlas, seguramente sería muy pequeña cuando murieron, pero me parece puesto en razón que se incluyan aquí sus nombres, seguramente las gentes de Celucos tendrán buenos recuerdos de ellas.
El nombre del protagonista de la foto que me prestó Nano, creo que ya lo conoceréis, sobre todo las personas de una cierta edad.
Su nombre -como consta en el reverso de la fotografía - era Jorge Garcia, y en ese mismo reverso se puede leer la dedicatoria completa. Como estos, hay otros nombres que consevo en la memoria . Marivitor, Lores, Maria Cos, madre de Ceta de Logio y de mi buen amigo Paulino. Creo que el padre de estos se llamaba Valeriano. Algunos mas se me quedarán y mucho que lo siento, y pido perdón por ello.
En mi disculpa está el que yo seguramente no los conozco a todos. Sin embargo, estén o no estén, entre los aquí nombrados, en nada desmerecen entre todos ellos.
Y solo ruego perdonen el olvido, pues
siempre será involuntario. También puedo
haber cometido algunas inexactitudes, digo lo mismo, y también pido perdón. De todos modos, no descartaré algunos mas que me puedan ir llegando, pues nunca está demás que conservemos su memoria
Como posdata, alusiva a su Santo Patrón San Juan, y con
motivo de su fiesta y recuerdo de homenaje a Eduardo el hijo de Ina y Andres,
que nos dejo recientemente, incluyo las fotos del día de la festividad del
Patrón, en su capilla de Celucos.
Su nombre -como consta en el reverso de la fotografía - era Jorge Garcia, y en ese mismo reverso se puede leer la dedicatoria completa. Como estos, hay otros nombres que consevo en la memoria . Marivitor, Lores, Maria Cos, madre de Ceta de Logio y de mi buen amigo Paulino. Creo que el padre de estos se llamaba Valeriano. Algunos mas se me quedarán y mucho que lo siento, y pido perdón por ello.
En mi disculpa está el que yo seguramente no los conozco a todos. Sin embargo, estén o no estén, entre los aquí nombrados, en nada desmerecen entre todos ellos.
También agradecer la excelente barbacoa con la que fuimos convidadas cuantas personas nos acercamos a la bolera, donde una organización de lo más activa, repartía tortas de maíz con huevos fritos, panceta, salchichas… así como un arroz con leche que estaba para repetir,- algo que hicimos,- convidadas como digo, por la atención de las cocineras.
Mi felicitación a esa buenísima merienda, así como a las cocineras, particularmente a Rosi y a Lolita, pero sin desmerecer en nada a todas las personas que esa noche se desvivieron por atender a todos cuantos nos acercamos a la bolera de Celucos en la fiesta de San Juan. Repito, felicidades a tan buena organización.
DEDICO ESTE ARTÍCULO A CELUCOS Y A TODA SU GENTE
UN SALUDO
PARA TODOS, DE MARY PÉREZ. DE CELIS.
AMIGOS DEL BLOG: ESTE ARTÍCULO TENÍA QUE HABER SIDO PUBLICADO EN LOS PRIMEROS DÍAS POSTERIORES A LA FIESTA DE SAN JUAN. POR MOTIVO DE LA VENTA DE LAS RIFAS MUY NECESARIA EN LA RECAUDACIÓN DE SAN PEDRO, EN LA QUE PARTICIPO, NO ME QUEDÓ EL SUFICIENTE TIEMPO LIBRE PARA PREPARAR ESTE REPORTAJE, DESPUÉS DE ESO, UNA INDISPOSICIÓN MÍA POSTERIOR ME HIZO PERDER UNOS CUANTOS DÍAS MAS. POR TODO ELLO EL ARTÍCULO SE HA RETRASADO MAS DE LO QUE YO HUBIESE QUERIDO. PERO AL FINAL TODO SE A ARREGLADO. SOLO ESPERO QUE OS GUSTE ESTE RECUERDO QUE HE INTENTADO HACER LO MEJOR POSIBLE DE VUESTRO PUEBLO DE CELUCOS.
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