LA HUELLA DE SUS PASOS PARTE 6

Hola amigos: Con este nuevo capitulo de " La huella de sus pasos" sigo dando salida a todos los personajes que un día, hace ya muchos años,- tantos que la mayoría de ellos se nos pierden en las brumas de la memoria,- de todos aquellos recuerdos que nos puedan quedar de lo que fueron sus vidas, y lo que de esos recuerdos podamos recuperar, para que su paso por los lugares que tanto caminaron no se nos pierdan para siempre. Creo que por lo menos ese sentimiento de memoria se lo debemos. Los años nos van alejando cada día mas de lo que fueron sus vidas, por eso este pequeño recuerdo será también como un merecido homenaje a ese recuerdo. 

Teresa la del palacio

                                                                 

Otra notable familia del pueblo, fue la de Teresa y José, o como siempre los conocimos, la familia del Palacio. Siempre se conoció a esta familia,( y todavía se la conoce ) por ese apelativo, por ser los propietarios de la hermosa casa de estilo colonial, ubicada en una bonita finca al lado de la carretera.

 Carmína la del palacio

 Creo que esta magnífica vivienda fue comprada por esta familia, a principios del siglo pasado, siglo XX, a sus anteriores propietarios, cuya familia que por lo visto no era de nuestro pueblo, nunca he conocido nada de ellos o sus descendientes,  los cuales creo que recalaron en él, por ser este señor el médico del pueblo, pero tampoco sé a ciencia cierta si eso fue así. Yo es lo que he sabido, pero mis fuentes al ser ya muy lejanas en el tiempo, no sé hasta qué punto puedan ser exactas.

Carmina y unas amigas

                                                              

Teresa y su familia siempre vivieron bastante desahogadamente, para los tiempos que corrían. Su marido se llamaba  José, y pasó casi toda su vida navegando, este trabajo permitía a la familia, como digo, vivir muy desahogadamente, pues eran tiempos en los que estas compañías navieras, traían muy importantes mercancías, de las cuales también podían abastecerse los empleados de estos grandes e importantes barcos. El sueldo también era bastante mejor remunerado, aunque esto también era relativo.

 Gloria y Concha hijas de Teresa

 En unos años en los que en nuestro país, se pasaban muchas necesidades  por escasez de multitud de productos, las gentes que tuvieron la “ suerte” de optar a un trabajo en una de esas compañías navieras, fueron muy afortunados en poder ,como digo, abastecer a su familia de todo aquello que sería impensable en cualquiera de las demás familias del pueblo.

 Nietos de Teresa la del palacio

                                                           

 He puesto entrecomillado lo de la “suerte”, porque esto también podía ser relativo. La vida en los barcos que hacían las rutas a ultramar, no creo que fuese tampoco un camino de rosas. Todas las facilidades que lograron para que a sus familias no les faltase de nada, lo sufrían ellos con un trabajo a veces agotados, al decir de personas que tuvieron que vivirlo, (mi abuelo y bisabuelo paternos entre otros..) Horas interminables de cargas y descargas, de guardias tanto de día como de noche, vigilando para que no surgiesen imprevistos irreparables, pues no hay que olvidar que la vida transcurría en un mundo flotante, lleno de imprevistos y peligros, no siendo los menores las muchas tormentas, que las bravuras del mar podían deparar cuando esto ocurría.

 Gloria,Concha y Carmina

                                                                    

También las nostalgias por los seres queridos, en unas travesías que podían durar muchos meses del año, viviendo en sofocantes camarotes, cuando el calor apretaba, o con fríos y mojaduras en los días o noches de tormentas. Teresa y José, tuvieron cuatro hijos, Gloria, Concha, Carmina, y un hijo que iba para sacerdote, y que murió en la sinrazón de la guerra cuando no era más que un joven seminarista. Un gran dolor que  esta familia, y sobre todo  Teresa, su madre nunca logró superar.

 Familia del palacio

De las hijas de Teresa y José, Gloria se casó con Domingo, que fue hermano de Benita, la mujer del que fuera muchos años médico de Puentenansa, Don Matías. Tuvieron cuatro hijos, Dominguín, fallecido hace varios años, casado y creo que con dos hijos, Pepín, casado, pero no estoy segura de cuántos hijos tiene.  Esta familia vivió muchos años en Barcelona, y años mas tarde volvieron a Santander, y aunque en vacaciones volvían mucho por Celis, por la casa de su abuela Teresa, con los años, una vez fallecida ésta, sus regresos fueron mucho más espaciados.

 Familia del palacio

                                                                   

 Gloriuca casada y con un hijo y una hija, creo que casados, pero no estoy segura, Quino, su marido, no recuerdo de que localidad era, si sé que los dos trabajaron muchos años creo que en Solares,   siempre fue muy querida en el pueblo, y muy sentida su muerte, ocurrida hace poco tiempo, siendo todavía una mujer bastante joven. Tan querida como su hermana Juli Tere, la más pequeña de éstos hermanos. Juli Tere, también casada con un chico de Castañeda, Epi, localidad en la que han vivido, y siguen viviendo en la actualidad. 

Segundo y Segundin

  Concha, la única hija de Teresa y José que vive en la actualidad, cuenta ya con noventa y muchos años. Se casó con el hijo de una familia de Santander, médico de profesión. Tuvieron también cuatro hijos, tres hijas y un hijo, tampoco se mucho de ellos, pues toda la vida han vivido fuera, creo que en Solares, donde el marido de Concha ejerció de médico titular.  Siendo muy pequeños sus hijos, Concha y su marido, volvían por la casa del Palacio, en temporadas vacacionales, pero al igual que la familia de Gloria,  al hacerse mayores sus hijos, cada vez volvieron menos.

Familia del palacio

                                                                 

También que una vez fallecida Teresa,( José, su marido, había muerto muchos años antes,) y que con los años, también Carmina la hija mas pequeña, y la que vivió siempre con ella hasta su muerte,  junto con Segundo, su marido, decidieran marchar a Santander, para poder estar cerca de sus hijos, todos estudiantes en la Capital, la casa del Palacio, pasó a ser más bien casa vacacional de Carmina y Segundo, y también de sus hijos, cuando éstos podían acompañarlos al pueblo. 

Grupo familiar

     

  Cierto es que, y ya una vez jubilado Segundo, el matrimonio, pasó muchas más temporadas en Celis. Sus hijos, José Carlos, Menchita, y Segundín, ya mayores, no necesitaron de la tutela de sus padres, y estos pudieron volver de forma casi permanente a la casa del  palacio. José Carlos, se casó con una hija de Vicente, y Paca, vecinos del barrio de la Central de Saltos del Nansa de Celis, donde Vicente trabajó toda su vida laboral,  aunque ellos descendían de los pueblos de Luey y Camijanes. Unas buenas personas y muy buenos vecinos.  

Carmina y Concha con unos amigos

 José Carlos,- que siguiendo la tradición de su abuelo y su padre, estuvo muchos años como oficial en importantes barcos creo que mercantes.  El y Paquita, su mujer, fijaron,  su residencia en Santander, y tienen un hijo, Carlos. La mala suerte también se cebó en esta familia, pues José Carlos, murió siendo todavía muy joven. Una triste pérdida, pues también se nos fue una gran persona.  Menchita, se casó con otro de los hombres que más simpatías despertó siempre en nuestro pueblo, José Arrutti, un gran empresario, y mejor persona, También murió hace unos años a una edad relativamente joven. Hoy en esa empresa de los Arrutti, muy conocida, es su hijo José Luis,  uno de sus dirigentes, junto con la familia de su padre.  La otra hija de Menchita, y Pepe , Paloma, vive y trabaja fuera, está casada, y tienen dos hijas.  

Grupo familiar, a la izquierda Maria Rosa de Riclones

         

Y por último Segundín, el hijo más pequeño de Segundo y Carmina. Segundín, también estudió náutica, y también estuvo navegando durante un tiempo, aunque por motivos de salud, se retiró de los barcos hace bastantes años, vivió con sus padres hasta el fallecimiento de éstos, pues está soltero. Y en Santander, sigue viviendo, aunque muy de tarde en tarde viene a darse una vuelta por su pueblo.   Y ya es de justicia, recordar al benjamín de la familia, al que la sinrazón de la guerra, le costó la vida, solo porque, siguiendo su vocación, tuvo la mala suerte de caer en una de las peores represiones que se ejercieron contra los seminarios durante los primeros días de la guerra civil.

Su muerte, tan injusta, fue un crimen, contra un chico, de dieciséis años, que, al decir de cuanta gente le he preguntado, jamás había hecho daño a nadie, solo encontrarse con muchos más compañeros en el colegio donde cursaba sus estudios, cuando junto con todos ellos fueron llevados al faro de Cabo Mayor, y se supone, que lanzados por aquellos tremendos despeñaderos. El dolor de una madre, que nunca más volvió a ver a su único hijo, solo ella sería quien para saber sus sentimientos y su dolor, yo sería capaz de imaginármelo.

Carmina del palacio y un familiar

Que nadie se llame a engaño. El mismo sentimiento que le pudo haber pasado a la madre de un hijo que le hubiesen hecho lo mismo encontrándose en el bando contrario. Un criminal siempre será un criminal, en un lado o en otro, creo que esto es lo que no se puede olvidar.

Nunca justificaré, los crímenes de uno ni otro bando, no soy nadie, para juzgar un horror que, gracias a Dios no conocí. La cruel muerte de estos jóvenes seminaristas fueron unos de ellos. Dios quiera que nunca más se vuelva a repetir.

El hijo de Gloriuca recibiendo su titulo de ingieniero del entonces principe

                                     

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En este mismo barrio cercano a las familias de Joseíto y Loina, en el barrio donde estaban las escuelas,  y cercano también a la familia de los del Palacio , vivieron Teresita, hermana de Candidín, así como sus hermanos, Cecilio, Consuelo e Irene.  Esta casa, ( hoy demolida) estaba al lado de la carretera, y frente por frente de la de Joseíto y Loina. 

De todos estos hermanos, que yo sepa, solo se casó Cecilio,  y de forma permanente, solo vivieron en ella Teresa y Candidín, pues las otras dos hermanas, pasaron algunos años sirviendo en casas, en diferentes lugares de la provincia, aunque tengo entendido que cuando murieron ya habían regresado a su casa del barrio de la escuela.

Cecilio el de Arenas

  Con la remodelación de la carretera de hace unos años, y al haber desaparecido ya sus propietarios, esta casa fue comprada por los vecinos colindantes  a sus herederos, y al ser expropiada una gran parte de ella, por dichas obras, fue derribada para construir un gran paredón a pie de carretera. A pesar de los años transcurridos, siempre tengo en mi memoria, el recuerdo de esta familiar casa, pues era una de las más cercanas a las antiguas escuelas del pueblo, donde muchas generaciones de críos aprendimos nuestras primeras letras.

Candidin y su padre asomado a la puerta de la cuadra

                                                           

Y tengo también en la memoria, los muchos saltos y correrías que con nuestros juegos realizamos alrededor de ella,  siempre bajo la atenta mirada de Teresita y sobre todo de Candidín, el cual dado su físico, más parecido al de un niño, siempre mirábamos con toda la curiosidad propia de los críos, pues su pequeña estatura, sin ser propia de las personas enanas, tampoco correspondía a la que podría ser de un hombre adulto, y especialmente de un adulto ya muy entrado en años.   Era lo que ya en otras ocasiones, y en referencia a la persona de Candidín, calificaría como un niño viejo. Su voz de un timbre como aflautado era para los que éramos entonces unos críos, otro misterio, dada su peculiaridad,  algo que no sabíamos descifrar.

 Irene, una de estos hermanos. En la foto con su ahijada Irene a la que amadrino en Reinosa cuando trabajaba para esta familia

Hoy “misterios” como este y otros mucho mas”peculiares”  ya no nos crean ninguna curiosidad, estamos en una era de tantas tecnologías y tantos avances en todos los aspectos de la vida, que un físico como el de nuestro querido y recordado Candidín, no nos causaría la menor sorpresa. Hoy seguramente, todos los de mi generación, y algunas anteriores y posteriores, lo mejor que recordaremos de éstos hermanos, serán lo buena gente que eran, y lo mucho que su recuerdo pueda tener de amable y cariñoso, para una gran caterva de revoltosa  chavalería, a la que de forma estoica supieron soportar desde su casa tan cercana a nuestra escuela.

  Foto de Candidin. como siempre le conocimos sentado en la escalera de su casa

                                  

 Una casa en la que su parte baja correspondía a cuadra, o bajo para almacenamiento de los aperos de labranza, propios de las gentes del campo.  En la  parte alta se accedía por unas escaleras de piedra en un lateral, donde estaba la puerta de entrada a la vivienda propiamente dicha. Aunque todavía mucha gente recordará esta casa, yo prefiero describirla tal como siempre fue, y que su recuerdo no se nos pierda en el olvido, hoy solo un necesario, pero muy frio muro de piedra, es testigo del lugar donde  tanto saltamos y jugamos los niños de nuestra antigua escuela de Celis. Mi pequeño homenaje a esas maravillosas y sufridas gentes del barrio de nuestra escuela.

 En la foto a la derecha Rosina, hija de Cecilio con su hija Elvira," Viri" y unas familiares en la Capilla del Carmen el dÍa de su fiesta

          

  Cecilio, que como queda dicho, era el único que estaba casado, lo estaba con Rosa, del barrio de Arenas, Cecilio trabajó muchos años para el “Indiano" atendiendo el ganado.  El y Rosa tenían tres hijos, Rosina,  Paco, y Manolín, los tres gracias a Dios vivos, y sobre todo Paco y Manolo en muy buena edad, Rosina es unos cuantos años mayor que sus hermanos, pero goza de muy buena salud. Su marido Milio, murió hace unos cuantos años.  Paco y Manolin, se casaron y viven con sus respectivas familias en Santander, aunque les gusta volver de vez en cuando por su barrio de Arenas.  Por este barrio volveré más adelante, pues en él, vivieron, y viven actualmente, algunos vecinos  que hay que recordar, entre ellos claro está, a ésta familia.

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En el barrio de la Torre, vivieron también el tío Benito y su mujer, Irene. Del tío Benito que murió hace ya muchos años, poco he podido recabar, sus hijos también ya todos han desaparecido hace años, así como alguno de sus nietos mayores. de estos, algunos viven fuera y tampoco creo que sean muchos los recuerdos que puedan tener de sus abuelos. Si tenemos en cuenta que hace años la edad de en que una persona se le podía considerar viejo, era poco mas o menos a los setenta años, y que su desaparición de este mundo también podía coincidir con esa edad, poco mas o menos, no es extraño los pocos recuerdos que hoy puedan tener de el los descendientes mas jóvenes,- y por jóvenes, estoy hablando de nietos que la mayoría pasan muy de largo de los setenta años años.

 Milia hija de Benito con Nano su marido y sus hijos  

 Algunos a muy pocos de los noventa, eso de los que están todavía vivos, pues dos de los que ya murieron pasarían de esta edad.  Por todo ello mis notas se centraran mas, en lo que pueda quedar del recuerdo de sus hijos. Solo comentar, que de los pocos recuerdos que he podido recabar, del Tío Benito, eran los de una persona bastante cabal y de una gran autoridad entre los miembros de su familia. muy hablado gramaticalmente, y dotado de una cierta cultura.

 Creo que en sus años mozos vivió fuera de su pueblo, y eso tal vez le dio un mayor entendimiento de su forma de ver la vida. Sea como sea, este es el rasgo que mas queda de lo que debió de ser su carácter. De Irene, su mujer, poco o nada he sabido, pues creo que murió bastante joven, y apenas queda nadie que la recuerde. Solo queda el recuerdo de que este matrimonio vivió en la casa de la Torre, hoy heredada y habitada por una de sus nietas junto con sus hijos. 

Gupo de nietas del tío Benito, de hace ya unos cuantos años. 

Benito e Irene su mujer, fue un matrimonio que tuvo siete hijos, Paulino, que vivió muchos años en San Sebastián, donde se casó. Paulino tuvo tres hijos, Merche, Joséchu, y Marisa, los tres casados y todos ellos con hijos y nietos.

Todos ellos siguen viviendo en el país Vasco.  Paulino padre ya murió hace muchos años, así como su mujer, María. Ángel, conocido como “Lito” se caso con Lorines, de Celucos, hija de Manuel Sánchez y Nemésia.  Posteriormente se trasladaron a vivir a  Cádiz, concretamente a Rota, donde Lorines tenía unos tíos. Tuvieron cuatro hijos, Ángel, Manolo, Irene, y Jesús, todos ellos solteros, aunque ya falta Irene, que murió a una edad bastante temprana. Todos los demás, siguen viviendo en Rota.

Jesús hijo del tío Benito con Concha su mujer y sus hijas

Los otros dos hermanos, se llamaban, Tino, y Jesús, los cuales emigraron muy jóvenes a la Argentina. De Tino se sabe muy poco, se cree que se casó, y que adoptó una hija, pero no se tienen más noticias. Sí se sabe que Tino murió hace años, y nunca más volvió a España.

Jesús ya se había casado cuando marchó a la Argentina, su mujer Concha, emigró con sus hijas años después, estas se llamaban Carmina, y María Paz. Creo que se instaló toda la familia en Tucumán, su hija pequeña, María Paz, murió siendo una niña, y Carmina también murió joven, con el sueño siempre de volver a España.

Concha cuando regreso a España, en la foto charlando con Encio en el parque de Celis

Su padre ya había fallecido también, y pasados los años, y al quedarse sola, Concha quiso regresar a su pueblo, donde murió hace ya varios años. Hay que tener en cuenta que toda esta familia, incluso los más jóvenes, hoy ya serían muy mayores.

De los hijos del Tío Benito, Emilia, la mayor de las hijas, se casó con Laureano “ Nano el de las Conchas,” hijo de Serafina, más conocida por la tía Cuca, y de su marido Julián.  Milia y Nano tuvieron doce hijos. Fueron estos, Pepe, Lito, Pilar, Segundo, Julián, Servando, Serafín, Angelita, Manolo, Paulino, Tere y Merche. 

Milia y Nano en la foto de su boda

Pepe se casó con Ción de Puentenansa, y tuvieron un hijo, Pepín, el cual a su vez tiene una hija, Marta.   Lito el segundo de los hermanos no se casó, tuvo siempre problemas de salud, y murió a una edad temprana,  Pilar, se casó con Antonio ( Tuto) hijo de otra de las familias del pueblo. 

 Tuvieron dos hijos, Chantal, y Federico. Vivieron en Francia muchos años, y allí nacieron sus hijos.  Con los años, y al jubilarse, volvieron a España, y viven en Celis, su pueblo. Chantal su hija, es tiene como pareja a un chico de Rábago, y viven y trabajan  en Torrelavega, y Santander, no tienen hijos. Fredi, está soltero, y siempre ha vivido en la casa familiar.  Segundo se casó con Nisia, hija de Santos Dominguez, y Ángeles Cotera, familia de Celis.  Tienen tres hijos, Maite, casada en Puentenansa con uno de los hijos de Eleuterio del Pozo, de la familia de los “pellejeros” de Puentenansa, un buen comercio de muebles y electrodomésticos.  

  La casa de las Conchas en la actualidad, vivienda familiar de Milia y Nano 

Son también los distribuidores del butano en una zona muy amplia.  Segundín,  y Santi, los dos solteros, Santi el pequeño vive y trabaja en Santander y Segundín esta empleado en la empresa Saltos del Nansa, tiene casa propia en Celis, donde vive actualmente. Julián también se casó en Puentenansa, y tienen un hijo, Marco Antonio. Viven en Maliaño.  Marco Antonio está soltero y vive con sus padres. Servando se casó en Celucos, con Aurora(  Guina para todos), tuvieron tres hijos, Raúl que murió muy recientemente, casado y con un hijo.  Mónica, casada y creo con un hijo, y Natalia, también casada, y con otro hijo.  Todos ellos viven en Madrid.

  Milia de joven  

                                                                   

Serafín casado con Mary, hija de Rosina y Alejandro, de los que ya he relatado mas arriba. Serafín y Mary, su mujer, llevaron conjuntamente con Rosina, el Restaurante “Casa Jandro” una vez jubilado este. Tuvieron tres hijos, Roberto, Ricardo, y Gloria. Actualmente y al morir Serafín, su hijo Roberto se ha hecho cargo del Restaurante, el cual ha sido muy remodelado. Anteriormente otra importante reforma hizo una gran ampliación en sus instalaciones,  con lo que en esta familia la tradición hostelera parece bien asegurada. Los otros hijos Gloria esta soltera, y vive y trabaja en Santander.  Ricardo, también soltero, vive en la casa familiar, pero en su propio apartamento.

Milia pasados los años

                                                             

Manolo casado con otra muchacha del pueblo, Mari, tuvieron dos hijas, María Jesús, “ Chus” y Ana, casadas las dos. Chus con un chico de una familia de Lamasón, aunque tanto el como todos sus hermanos nacieron y han vivido siempre en Torrelavega, donde siguen viviendo, y trabajando. Tienen un hijo y una hija, Diego y Ángela. Ana también vive con su marido en Cieza, cerca de Torrelavega, y de los Corrales de Buelna, donde Manolo, su pareja, trabaja.

Varias nietas descendientes del tío Benito

                                                         

Tienen una hija Irene . Angelita se casó con Julián, hijo de Ción y Julian, de cuya familia ya se ha hecho referencia, y tienen dos hijas,  Pilarín y Cristina, las dos casadas y con un hijo cada una. Adrián y Ángel.  Pilarín vive con su familia en Puentenansa, de donde es su marido. Cristina vive en Celis. Angel  y Adrian  están solteros, y viven en la casa familiar. Paulino se casó con una muchacha asturiana, Elvira y tienen dos hijos, también casados, Víctor, y Moisés.  

 Irene e Irenita hija y nieta del tío Benito

                                                             

Vivieron muchos años en Alcalá de Henares, pero actualmente han vuelto a Celis, donde viven ya de forma permanente. Sus hijos viven en Andalucía con sus respectivas parejas. Sara Y Chica. Víctor tiene un hijo, y Moisés y Sara están esperando también un hijo.De las dos más pequeñas, Tere, se casó con un chico de Torrelavega, Tinín, y tiene dos hijos, Cecilia, y Laureano. Cecilia está casada, y Laureano soltero. Cecilia vive con su familia en Torres, y tienen dos hijas. Tere y su hijo viven  en Celis.  Tinín murió también hace unos años.

Nano y Milia en las Conchas

                                                                   

Merche se casó con Toñín, también de Celis, concretamente del barrio minero de la Florida, de la familia de los Cotera. Su hermana Nisia está casada con Segundo, hermano de Merche. Casualidades de la vida, dos hermanos casados con dos hermanas, aunque en diferentes tiempos.  Tienen dos hijos, Toñín y Pedro, los dos casados. Toñín tiene dos hijas, Pedro no tiene familia.   De esta familia tan numerosa, ya faltan cuatro hermanos. Pepe, el mayor, Lito, Manolo y Serafín, así como los maridos de Tere y de  Pilar.

Todos hijos de Milia y Nano, nietos del tio Benito

Jacinta se casó con José María Cotera, de otra de las familias del pueblo.  Tuvieron ocho hijos, siete hijas y un hijo. Fueron estas: Carmina, casada con Alfredo, un chico andaluz, al que conoció siendo éste guardia civil, creo que sus hijos son nueve, pero no conozco todos sus nombres, la mayoría casados o en pareja, pero tampoco sé quiénes de ellos. Jacinta, ( Intuca), no se casó pero tiene una hija y creo que dos nietos. Viven todos en Santander.

 Casa natal del tío Benito en el barrio de la Torre   

Milagros, casada con Luis, del poblado minero de Cabiña, donde siempre han vivido, al ser Luis minero de profesión. Tienen creo que cuatro hijas y un hijo, también varios nietos, pero desconozco cuantos son de cada hijo. María de los Angeles, (Cuqui) casada con Pepe, empresario camionero, creo que tienen tres hijas, y también tienen nietos, pero no estoy segura de cuáles de sus hijas son. Toda la familia ha vivido siempre en Santander. Maruchi, casada con Juan Miguel, también han vivido siempre en Santander, de donde es Juan Miguel, tienen creo que tres hijas, y también nietos, lo que no sé de cuáles de sus hijas son, ni cuántos hijos tiene cada una.

 Casa de la torre vivienda familiar del tío Benito. Muy remodelada en la actualidad vivienda actual de su nieta pilar

           

 Si sé que todos ellos viven en Santander, aunque suelen venir bastante por su casa del pueblo, una bonita casa en una bonita finca. Rosita es melliza con Maruchi, también casada con un muchacho de Bielva,  Jóse, tienen un hijo y una hija, el chico casado y con hijos, la hija no está casada, pero creo que vive con su pareja. Todos ellos también han vivido siempre en Santander. Y por último, Marene, casada con Modesto, de la familia de los molineros del barrio de la Molina. Además del molino, esta familia, era dueña de la Central eléctrica, que surtía la corriente de toda la comarca del Nansa, una empresa como digo familiar, que administraron tanto Lecio, el padre, como casi todos sus hijos. 

 Casa de las Conchas de Nano y Milia

Actualmente “Electra la Molina” ha sido absorbida por otra potente Empresa Nacional, creo que dependiente de Viesgo, previa venta de sus dueños. Marene y Modesto, tuvieron tres hijos, Elena, casada y con una hija, Rosalía, y sus hermanos, Eduardo y Enrique. ( Quique) este casado, y Eduardo soltero. Toda la familia vive en el barrio de su propiedad,” La Molina”. Desgraciadamente, además de los padres, también han muerto tres de los hijos de Lecio;  Eduardo, y Manín hace años, y Modesto, más recientemente, una triste pérdida, pues los tres eran bastante jóvenes.

Nietos de Jacinta, hija del tío Benito

                                                       

 Y por último, aunque cronológicamente, es el mayor,  de los hijos de Jacinta y José María,  José Mari, el cual se había casado con una chica de Santander, donde siempre vivieron y trabajaron. José Mari y su mujer, tuvieron, dos hijas, creo que casadas las dos, pero no estoy muy segura tampoco  si son dos sus hijas. Como digo vivieron en Santander y pasados los años creo que en Madrid. José Mari enviudó hace unos años. Sabemos poco de su vida y su familia, pues por el pueblo poco o nada han venido desde que se casaron hace ya muchos años. José María, el marido de Jacinta era hijo de  Luciano y Milagros, del barrio de Arenas.

Irene hija de tío Benito con dos de sus hijos

                                               

Irene la pequeña de las hijas del tío Benito, se casó en Bielva, su marido Elías era de la familia Borbolla, Elias fue represaliado al finalizar la guerra civil, y condenado a varios años en una cárcel en Madrid, por lo cual su mujer Irene, junto con sus hijos, decidieron, trasladarse a vivir en esa capital para poder estar más cerca de el.  Una vez liberado su marido, toda la familia siguió viviendo en esa ciudad de forma permanente.  Irene y Elias tuvieron cuatro hijos, Elias José Luis, Benita, y Merche. Elias casado con Araceli, tienen tres hijos, dos hijas y un hijo.  José Luis, tuvo una hija de un primer matrimonio, y otras dos de un segundo.Las tres están solteras. Merche se casó con Tomás, un chico madrileño, del que se separó años después. Tuvieron dos hijos, Sergio, y Abel, los dos casados y con hijos.  Merche murió recientemente, y unos años antes, también había muerto su hermano José Luis.

 Benita, Jose Luis y Merche hijos de Irene

Elias padre también había fallecido bastantes años antes, con lo cual pasado un tiempo, Irene y su hija Benita, decidieron vender su vivienda de Madrid para que Irene madre, pasase sus últimos años en su tierra, pues Elias hijo, ya lo había hecho años antes junto con su propia familia. Y aquí falleció hace unos meses la hija mas pequeña del tío Benito, Irenuca, a la edad de ciento dos años.  De la familia de José María Cotera, yo nunca conocí a sus padres, solo sé que se llamaban Luciano y Milagros, y tenían tres hijos, José María, Ángeles y Eugenio. Luciano a su vez era hermano de José Cotera, y su mujer se llamaba Consuelo.

Casa de Jacinta y Jose Maria en el barrio de Caramanchón

                                            

Este matrimonio, tenía a su vez, dos hijos, José, y Ángeles, primos por lo tanto de los tres hermanos Cotera. José María, casado con Jacinta, y Eugenio ( Genio) casado, pero no sé de donde era su mujer, aunque he sabido que tuvieron creo que seis hijos,  y Ángeles casada con Gabino, hijo de la tía Sina y Diego, de cuya familia ya he hecho referencia en otro de los apartados del relato.  

Marene la hija mas pequeña de Jacinta

                                                         

Ángeles y Gavino tuvieron a Luciano y a Delia, y con ellos se crió como una hija más, Elvira, fruto de una relación anterior de Ángeles. Ésta familia vivió siempre en el barrio de Arenas, en la casa de sus padres, con ellos vivió hasta su muerte Leonoruca, hermana de Milagros, la mujer de Luciano Cotera.

El barrio de Arenas la casa de Angeles Cotera y Gavino

                                             

El otro hermano Cotera, José, como ya explico más arriba, estaba casado con Consuelo, pero ya de la familia de Consuelo no tengo por el momento, ninguna referencia, si alguien me da alguna la iré incluyendo en el relato. Solo sé que Consuelo y José vivieron muchos años en el poblado minero de la Florida, pues José fue de los primeros trabajadores de esas minas.

Padres, Hijos y Nietos de la familia Cotera

 Con los años, y ya muy mayores, José y Consuelo, se bajaron a vivir en una casa de Celis, que supongo que sería de sus familias, aunque también pudieron comprarla, una vez decidieron vivir en el pueblo. Su hijo José, así como con el tiempo su yerno Santos Domínguez, también trabajaron en esas minas de la Florida, su hija  Ángeles y su marido, siguieron viviendo en la casa de sus padres en ese poblado minero, aunque con los años, y una vez jubilado Santos, también ellos volvieron a Celis, y ya fallecidos sus padres, viviendo ellos también en la casa del pueblo.  

Segundo nieto del tío Benito y Nisia nieta de Jose Cotera

José su hermano, pasados unos años vivió algo en Celis con su familia,  y más tarde marchó a trabajar a Torrelavega. Después de un tiempo, la familia decidió marchar  al país vasco, creo que a S. Sebastian. José se había casado con una muchacha de La Lastra,  Ester, con la que tuvo creo que seis hijos, aunque yo solo he tratado a dos de ellas, Esterina y Merche, esta última por haber vivido mucho de pequeña con sus abuelos en Celis, de los demás hermanos, solo tengo el recuerdo del tercero de ellos, que por desgracia, y ya viviendo en el país vasco, se mató en un desgraciado accidente. Ángeles y Santos  tuvieron tres hijos, José,( Pepe)  Dionisia ( Nisia)  y Antonio, ( Toñin) Pepe se casó con América,( Meri) hija de Pepe, del barrio de Bárcenas.

 Grupo de nietas de tío Benito

                                                           

    Tuvieron dos hijos, Servando, y Santos ( Santi)  los dos casados, aunque Servando está separado, y tiene una hija Diana, y Santi casado y con dos niños,  hija e hijo.  Pepe y Toñín, los hijos de Santos y Ángeles, también fueron toda su vida laboral, empleados de las minas de la Florida.  Pepe el mayor de éstos hermanos, falleció  hace varios años.

 Casa de Jose Cotera en el poblado minero de la Florida

                                                 

Y también han fallecido los padres y abuelos de esta última generación. De la familia Cotera, como de tantas otras, solo quedan los hijos y nietos, de los cuales también, ya faltan tres, todavía en una edad relativamente joven. Pepe, y su primo, hijo de Ester y José, de la familia de Celis, y Luciano de la de Arenas. Por suerte, en la parte positiva, nos quedamos con que todavía hay unos cuantos Cotera de las nuevas generaciones.¡ Que sean por muchos años.!    

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La tía Marcelina del Cortijo con sus nietos Nano y Jose Maria

De la que no tengo recuerdo, es de Marcelina, del barrio del Cortijo, y mucho menos de su marido. Marcelina tenía tres hijos, Higinia ( Ginia) Antonio, (Toñu) y Aurelia. Solo sé que Marcelina enviudó joven.  De sus hijos recuerdo mucho a  Ginia, que estaba casada con Segundo, hijo de la tía Cuca y de Segundo, del barrio de las Conchas, y hermano de Nano,conocido siempre como Nano el de las Conchas.   

Lines nieta de Marcelina el dia de su boda

                                                      

 Ginia y Segundo, tuvieron tres hijos, Laureano, “Nano”  Lines, y José Maria. Nano se casó con una muchacha de Polaciones, de la que hace muchos años está separado. Tuvieron un hijo y una hija, Rosa Mary, y Marcos,  los dos se casaron, pero la hija se separó hace años, y actualmente su pareja es un chico de Celucos. Rosa Mary  en su matrimonio, tuvo dos hijas, Adriana, y Sara. 

                                              Lines con su prima Pilar en la fiesta de las carrozas

Marcos también se casó, pero solo conozco a una hija, no sé si tienen más  hijos.  Lo cierto es que en Celis apenas se le conoce pues viene poco. Su hermana, viene casi todas las semanas, pues hace años, Nano, su padre, mando construir una casa grande para que la pudiesen disfrutar toda la familia. Aunque su vida siempre ha transcurrido en Santander, procuran disfrutar los fines de semana, y periodos vacacionales de esta casa del pueblo.  Lines se casó con un hijo de Loina y Joseito, - historia ya  publicada -  y no tuvieron hijos.

  Grupo de muchachos de Celis, a la derecha abajo Nano nieto de Marcelina

                       

José  María. Se casó en el vecino pueblo de Cades, su mujer se llama Angelita, tienen dos hijas, Ester, y Almudena, las dos casadas y con hijos. Toñu se casó en primeras nupcias, con Celsa, del barrio de Bárcenas, pero Celsa falleció joven. Toñu se volvió a casar con Josefa, hija de Diego y la Tía Sina, tuvieron un hijo y una hija, Pepita y Toñín.  Los dos casados. Pepita se casó con un chico gallego, del cual enviudó hace años.  

 A la derecha Lines nieta de marcelina con Carmina la rojita

                                                      

Tuvieron dos hijos, Carlos, y Mónica. Mónica está casada, vive en Santander y tiene  un hijo.  Carlos, el hijo, no se ha casado, vive con su madre en Santander, ciudad en la que han vivido y trabajado siempre, pero suelen venir de vez en cuando a la casa del pueblo, que Pepita heredó de sus padres a la muerte de estos.  Josefa y Toñu, ya murieron hace tiempo. La casa de Marcelina, del barrio del Cortijo, se le llama también, la casa de Estanco, pues en tiempos esa familia tuvo un estanco como negocio.  Por ello a los habitantes de esa familia siempre se les ha conocido como Marcelina la del estanco, o… Segundo el del estanco, o… Lines la del estanco…

Nano nieto de Marcelina

                                                                   

Son esas coletillas que siempre se dicen, sobre todo en los pueblos, y que en muchas ocasiones se les conoce más por dicho nombre, que por el suyo propio. De la familia de Segundo y Ginia, ya solo quedan los dos hijos, Nano y Pepe. Aurelia, la otra hija de Marcelina, se casó en Santander, donde siempre vivió. Tuvieron dos hijos, José (Pepe)  y Gonzalo. En Santander, estos hermanos, tuvieron un próspero negocio de curtidos, de buena fama en la Capital. “Curtidos Cámpa”. Pepe se casó con una chica de la Capital, Lolita.  

Gonzalo y Nano nietos de Marcelina con Remedios la del pasiego

                                              

Tuvieron creo que tres hijos, pero yo apenas los conozco, pues por Celis han venido muy esporádicamente, creo que están casados, pero no estoy segura. Tanto Pepe como su mujer, ya murieron hace años  Gonzalo se casó con Aurorita, hija de Aniceta ( Ceta)  y Joseúco.  No tuvieron hijos. Aurorita murió hace unos años, Gonzalo, aunque ya muy mayor sigue viviendo en Santander.

Precisamente al hilo de la familia de Aurorita, comentaré, que sus padres, como apunto más arriba, fueron Aniceta y José ( conocído como Joseucu) Este era hermano de Milio el de Teresa, de cuya historia ya he dado referencia.

Carmina y Lines. Foto de hace unos años

                                                     

Ceta y Joseucu, tuvieron a  Aurorita y Tiqui, la hermana pequeña. Tiqui se casó con un muchacho de Santander, pues en esa ciudad vivieron siempre, por lo menos desde que Ceta enviudase, pues Joseucu murió bastante joven. Tiqui y su marido tuvieron tres hijos, creo que casados los tres, - algo que no sé seguro - lo que no sé es si tienen hijos.

 A derecha e izquerda Aurorita, hija de Ceta y Joseucu, y Gonzalo nieto de Marcelina de padrinos en la boda de Francisco y Amparito. Ellos eran matrimonio.

Con el tiempo, Tiqui y Pedro, su marido, se separaron, y ella siguió durante muchos años con el negocio de Imprenta y librería, que tenían en una céntrica calle en Santander. También Tiqui y su marido, o ex marido, han muerto hace unos años. Adjunto la nota que acabo de conocer, y es que uno de los hijos de Tiqui, ha fallecido en estos días. Una pena, pues era bastante joven.

Segunda por la derecha, Tiqui, hija de Ceta y Joseucu. Con un grupo de amigos en la boda de Amparito y Francisco

       

  Finalizada la sexta parte de la huella de sus pasos.